jueves, 31 de octubre de 2013

¿Quieres escribir una novela? Semana 4

Y tú, ¿aceptas el reto?

Una semana más aquí os dejo la (más o menos) versión escrita de la clase ¿Quieres escribir una novela? Parece que no, pero el tiempo vuela y sin darnos cuenta ya nos hemos plantado en Noviembre. Como ya sabéis, estas clases estaban enfocadas a afrontar el NaNoWriMo de una manera más fácil y no morir en el intento.

Noviembre es un mes complicado, especialmente si vas a enfrentarte a esa locura que supone el NaNoWrimo. Digan lo que digan, no es fácil escribir una novela en un mes. No es fácil pero, a la vez, es terriblemente divertido. Y como precisamente lo que queremos es pasárnoslo bien el post de hoy va a estar dedicado a cómo sobrevivir al NaNo sin morir en el intento.

¿Estás preparado? Pues vamos allá…

Lo primero de todo es CALMA. Que sí, que lo sé, que Estamos a la fecha que estamos y, por mucho que te diga la gente que Bah, tampoco es para tanto, lo cierto es que tienes que escribir unas 1800 palabras al día. Unas cuatro páginas, así a ojo.

La cuestión no es que escribas 1800 palabras. La cuestión es que tienes que escribir 1800 palabras que tengan sentido, que se correspondan con lo que escribiste ayer y que te dé pie para, más o menos, escribir otras 1800 palabras el día de mañana. No se trata de escribir, sin más, se trata de escribir una novela.

Y, a pesar de todo lo difícil que pueda parecer, puede hacerse. Yo lo he hecho, miles de personas lo hacen cada año, de modo que es posible. Como ya os he dicho montones de veces, no esperéis que a primeros de Diciembre tengáis una novela lista para enviársela a vuestros editores favoritos. Ni mucho menos.

De hecho, si lo conseguís, por favor, explicadme cómo lo habéis hecho.

Cuando Noviembre termine tendréis, con mucha suerte, el primer borrador de vuestra novela o, lo que es más probable, una parte de vuestra novela. Puede parecer poco pero os aseguro que es mucho más de lo que mucha gente que siempre habla de escribir hará en toda su vida…

A estas alturas, ya deberíais saber de lo que vais a escribir. Lo ideal, por supuesto sería haber trazado un plan de acción, algo desde lo que arrancar sin echarte a llorar desde el primer minuto. Si aún no lo tienes claro, no desesperes, aún te faltan algunas horas, de manera que vamos a aprovecharlas.

Piensa en qué quieres escribir, en lo que te apasiona, en lo que te mueve de la silla. No hay tramas mejores o peores, no al menos en este momento y tanto si quieres empezar a escribir un romance de vikingos como una fantasía distópica lo importante es tener ganas. Piensa en lo que te gustaría leer, en lo que crees que va a motivarte más, y lánzate a por ello sin ningún tipo de dudas.

Antes de empezar a escribir necesitas algunos puntos básicos, algo con lo que construir esa novela que acabas de descubrir que quieres desesperadamente sacar de tu cabeza:

-¿Qué? Esto es, básicamente, la trama. ¿Qué es lo ocurre en tu novela? Un hombre descubre que su mujer lo engaña con otro y decide engañarla a ella como venganza. Una esclava romana envenena por accidente a su ama y no la descubren y, bueno, comienza a tomarle el gusto a eso de envenenar… Tu trama puede ser tan compleja o simple como desees, recuerda que es tu novela, de modo que nadie va a ir a darte un tirón de orejas. Si no has preparado nada con antelación puedes sentirte tentado de comenzar a la aventura. Puede que a ti te dé resultado, pero a mí no, de modo que te aconsejo que pienses, aunque sea durante quince minutos, en las posibles variantes que puede tomar tu novela. Aunque después lo cambies, al menos tendrás un punto de partida.

- ¿Quién? Aquí entran en juego tus personajes. ¿A quién le ocurren las cosas que has pensado en el anterior punto? A un profesor en paro, un médico jubilado, un tesorero que roba bolígrafos… Son ellos los que van a hacer que tu trama avance, de modo que no los des de lado. Van a ser ellos, con sus cambios de humor y sus reacciones desesperadas y/o totalmente gratuitas los que te van a salvar el culo en más de una situación adversa este noviembre. Mímalos. Dedica unos minutos a darles un nombre, por estúpido que te parezca (ya lo cambiarás después), a tratar de imaginártelos, a visualizar sus diferentes expresiones. Cuantos más vivos los sientas, más fácil va a ser escribir sobre ellos. Y fácil, en el NaNoWrimo es un sinónimo de rápido…

- ¿Cómo? Piensa en la manera que te resulta más fácil de escribir y lánzate a ello. Primera persona, segunda, tercera… No todas las historias exigen lo mismo, y no todas las historias reaccionan igual ante uno u otro narrador. Trata de imaginar cómo te vas a sentir más cómodo, como te va a resultar más fácil llevar a tus protagonistas a través de la historia. ¿Cambiando los puntos de vista? ¿Con un narrador omnisciente que sabe tus más íntimos pensamientos? Tú mismo.

La clave es comodidad... Recuerda que siempre vas a poder cambiar lo que escribiste. Incluso si te parece aberrante, si te dan ganas de llorar cada vez que lees lo que escribiste el día anterior, por muy malo que sea, no importa. En serio. No en este momento.

Lo importante es seguir escribiendo. Cada palabra cuenta. Cada nombre compuesto que utilices, cada adjetivo, cada conversación interminable sobre lo duro que está el pan y que ya no se hacen las cosas como antes cuenta. En serio. Cada palabra que escribes te acerca más a tu objetivo de modo que sigue tecleando. Por supuesto, una regla de oro durante el NaNo es no borrar nada. Ni una sola palabra. Ya editarás en Diciembre. O en Enero. O nunca.

Por supuesto, puedes tener en cuenta muchas otras variantes, como ¿Dónde? O ¿Cuándo? Eso va a depender de tu historia, de lo compleja que quieras hacerla. Si aún estás indeciso sobre si empezar o no el NaNo te aconsejo que le dediques una hora, quizás dos a tratar de pensar sobre estos aspectos y así veas qué puedes hacer. No se trata de elegir la opción más fácil, que también, se trata de encontrar esa historia que va a empujarte a escribir cada día, sin importa nada más.

En mi experiencia, he hecho el NaNo varios años. Algunos he terminado, otros no, pero siempre he sentido esa excitación antes de empezar, esas mariposas en el estómago que te avisan de que algo grande va a suceder. Por supuesto, cada persona es diferente, pero a continuación os doy mis consejos no sólo para sobrevivir al NaNo, sino incluso para ganarlo y terminar con éxito.

1. Escribe todo lo que puedas

 Vale, puede sonar estúpido y tópico, y más cuando hablamos del NaNo, pero escribe. Diez minutos mientras desayunas, doscientas palabras mientras vas en el metro, una hora por la noche, después de la ducha… Si en vez de escribir 1700 palabras al día escribes 2000 pues eso que llevas adelantado.

2. No borres nada 

Ni una sola palabra. Como os he dicho antes, cada palabra cuenta para lograr tu objetivo. Es normal que te sientas tentado de borrar tus últimas trece páginas, probablemente sea basura infumable (en el mejor de los casos), pero aun así no lo hagas. Piensa que cada palabra que borres tendrás que escribirla de nuevo, y a nadie le gusta trabajar para nada, ¿verdad?

3. Ignora tus errores

 Otra regla de oro que se ha repetido dos millones de veces, pero no importa. Cuando te sientas tentado de revisar lo que has escrito no lo hagas. No, al menos, si no es para ponerte en situación para lo que vas a escribir a continuación, para ponerte al día. Desactiva a tu crítico interior, ese tipo no hace más que molestar. Sí, aun así, lo que estás escribiendo te dan ganas de arrancarte tus propios ojos, señálalo de alguna manera. Sombréalo en otro color, déjate pistas a ti mismo, algo que te recuerde que debes cambiarlo, pero no ahora.

4. Rodéate de gente que esté haciendo el NaNo 

No tiene por qué ser gente que esté cerca físicamente. Con tener un contacto a través del mail, chats o redes sociales está bien. No os podéis ni imaginar, en momentos de angustia, lo que ayuda hablar con alguien que te entiende. Porque, seamos serios, la mayoría de gente que te rodea no va a entender el NaNo. ¿Por qué dedicar un mes a escribir una novela? ¿Por qué no salir cada día a pasear? Cada persona es un mundo, claro, pero si nunca has sentido esa necesidad de poner por escrito todo lo que te corre por tu cerebro desbocado pues, en fin, es difícil que entiendas las razones de los wrimos.

5. Diviértete 

Que sí, que suena estúpido, y más cuando estamos hablando de esa carrera contrarreloj para escribir tu cuota diaria, pero, en el fondo, los que hacemos el NaNo un año repetimos de modo que algo tendrá, ¿no os parece? Déjate llevar por tu historia, enamórate de tus personajes, preocúpate por ellos, por lo que sienten y por sus reacciones y no te importará lo más mínimo dedicarle un rato cada día a desarrollar su historia. Ni muchísimo menos…

Poco más puedo añadir. Cada año que pasa, cada Noviembre que llega me devuelve las ganas de escribir. Bueno, no exactamente. Siempre tengo ganas de escribir, pero podría decir que NaNoWriMo me da el impulso necesario para ponerme a ello. Sin complicaciones, si más historias.

¿Te he convencido? ¿Vas a participar este año? ¿Tienes algún truco que compartir con los demás mortales? Cuéntame ;)

miércoles, 30 de octubre de 2013

'Obras maestras de la pintura alemana' en el Museo Thyssen- Bornemisza, un ciclo de conferencias ¡gratuitas!

Es que Durero mola MUCHO

Este post va dedicado a esos que se que se quejan de que la cultura es cara. Que sí, que los precios de los libros son demenciales, que las entradas a los museos y exposiciones varias muchas veces se nos escapan del presupuesto, que ir al cine con tu novio y cenar algo después se ha convertido en un lujo. Sí, todo eso ya lo sé.

Pero, de vez en cuando, hay actividades molonas que no cuestan nada de nada. Totalmente GRATIS. Como, por ejemplo, el ciclo de conferencias que ha preparado el Museo Thyssen- Bornemisza y que lleva por título Obras maestras de la pintura alemana. Un total de cinco conferencias para conocer mejor los fondos del museo, impartidos por el gran Guillermo Solana.

Las conferencias tendrán lugar desde el 31 de Octubre hasta el 28 de Noviembre, cada jueves, en el Salón de Actos del propio museo, de 17:30 a 19:00. La asistencia es totalmente gratuita, PERO hay que recoger una invitación para poder entrar, debido al aforo limitado. Puedes retirar las invitaciones (hasta dos por persona) en el mostrador de Información, desde una hora y media antes de que empiece la conferencia.

Os aconsejo que miréis bien la página de información, y que os descarguéis el programa, pero, básicamente, estas son las conferencias planeadas:

31 de octubre | Alberto Durero. Jesús entre los doctores, 1506

 7 de noviembre  | Lucas Cranach el Viejo. La ninfa de la fuente, hacia 1530-1534 

 14 de noviembre |  Franz Marc. El sueño, 1912

 21 de noviembre |  Otto Dix. Hugo Erfurth con perro, 1926 

 28 de noviembre | Christian Schad. Retrato del Dr Haustein, 1928


Como podéis ver, estas conferencias tienen muy, pero que muy buena pinta. Para mí es una gozada adentrarme en un cuadro de esta manera, detalle por detalle, con todo lo que encierra y su momento en la historia. No deja de ser un acto un poco cotilla, eso de conocer a fondo un cuadro y su creador...

Lo malo de estas cosas es que, normalmente, son en Madrid, o en Barcelona, o en ciudades grandes, y claro, la pobre gente de provincias pues nos quedamos con las ganas. Pero bueno, igual podemos hacer un viaje con la excusa y tal... 

¡Si vais contádmelo, por favor! Quiero sentir mucha, mucha envidia

Más información | Museo Thyssen-Bornemisza

Writing Meme: Día 30 (¡¡¡Último día!!!)

Hace de santo, pero eso nunca nos ha frenado...

Y así es como llegamos al final de este Writing Meme. Con lágrimas en los ojos y negándonos a asumir el final de Octubre porque sabemos lo que nos espera a continuación y nos gusta sentir esa mezcla de histerismo y risa floja que nos entra cuando pensamos en el NaNo. De modo que, sin más, vamos a dejarlo todo cerrado y bien atado.

30. ¿Cual es tu mejor fuente de inspiración?

Vale. Aquí es cuando pierdo todo el poco respeto que me teníais. Os lo voy a decir con sólo dos palabras:

Tíos buenos.

Mis tíos buenos no suelen coincidir con los tíos buenos de otras, especialmente porque acabo con una insana fijación por personajes chungos que ni pagando una millonada a un psiquiatra conseguiríamos descifrar la razón. 

Si tenéis algo que decir me lo decís a la cara

Ellos son los que me empujan a hacer lo que hago. Ay. Me miran con esos ojitos, que no puedo negarles nada, nada.

Claro que no siempre son los que me empujan a escribir. Como me paso todo el día viviendo en mi propio mundo de galletas de mantequilla y bombones de caramelo, no es raro que continuamente me asalten ideas absurdas que de verdad que no tengo ni idea de dónde salen.

Esto que voy a decir ahora no es nada nuevo pero creo que la mayor inspiración para mí surge cuando estoy leyendo algo que me gusta. Es una mezcla entre envidia cochina y ganas de hacer algo con mi vida, que unido a ese torrente de ideas absurdas que de verdad que no sé de donde han salido pues al final dan como resultado eso. Esa cosa que escribo.

Cuando lo pongo por escrito, claro. 

martes, 29 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 29

Yo lo dejaría en 'Writer', a secas -_- 

29. ¿Cuantas veces piensas en escribir?

TODO. EL. TIEMPO. No, en serio. Otra cosa muy diferente es que luego me siente y definitivamente lo escriba, pero en mi mente estoy hilando historias continuamente y sin descanso. Voy en el tram, y voy pensado en alguna escena concreta. Estoy preparando la cena, y sigo pensando en qué nombre va a tener la hijastra de la vecina de la madre de la protagonista. Estoy en clase de búlgaro y pienso en todo el smut que deberíais estar escribiendo sobre mis personajes favoritos...

Y así me paso la vida...

lunes, 28 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 28

Más o menos, sí
28. ¿Has escrito alguna vez algún personaje con deficiencias físicas o mentales?

Umm, creo que no, si no contamos como deficiencia la incapacidad emocional y la irritable tendencia de mis personajes a ser unos parias de la sociedad, en todos los sentidos posibles.

Y sí, las respuestas son cada vez más cortas y yo cada vez estoy más acojonada >_< 

domingo, 27 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 27

Aunque no os lo creáis, nunca ha sido uno de mis protagonistas
26. ¿Es importante la apariencia de tus personajes en tus historias? ¿Cómo diseñas a tus personajes?

Normalmente no suelo hacer descripciones demasiado largas de mis personajes. Algunos apuntes para que el lector se haga una idea de lo básico (estatura, color de pelo, ojos, etc) y poco más. Sin embargo, tengo que decir que normalmente suelo tener una idea muy clara de mis personajes, incluso aunque no los describa, especialmente de los masculinos.

Muy especialmente, ya me entendéis.

Dado que mis historias nacen de mi amor por ciertos personajes, os podéis imaginar que los tomo como modelos mentales, aunque el lector nunca llegue a darse cuenta.

O eso espero, al menos. 

sábado, 26 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 26


Si yo supiera dibujar así, me pasaría el día dibujando Mary Sues

25. ¿Dibujas a tus personajes? ¿Los dibujan otros por ti?

Os voy a contar una cosa. Cuando tenía cinco años gané un concurso de dibujo en el colegio. Me hicieron subir al escenario, me aplaudieron y me regalaron un peluche con forma de teléfono que hacía ruidos diversos.

Todo apuntaba a que tenía un gran futuro por delante, pero ay, el destino me tenía preparada una desagradable sorpresa, y, como en tantas otras cosas, mi habilidad para dibujar quedó estancada en mi tierna infancia.

Así que no, no dibujo a mis personajes. Laia de vez en cuando me ha dibujado a algunos, especialmente a Mary Sues, pero no a todos, claro. 

viernes, 25 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 25

Mi mascota favorita son los Perros

25. ¿Tus personajes tienen mascotas? Háblanos de ellas.

Saffron tenía a Ein, un gato monísimo, reencarnación de mi propio gato (que en paz descanse, te quería mucho, mucho), pero la que se lleva la palma es Aliaga. Dado que la criaturita parece llevarse excepcionalmente con los animales, se pasa el día rodeada de ellos. Aún así, sus mascotas principales son su perro Bando, un gato llamado Sombra (que realmente no es suyo), un par de caballos, un halcón, un cuervo y sumando...

jueves, 24 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 24

Why, George, Why
24. ¿Eres capaz de matar a un personaje si la trama lo necesita?

Aunque a efectos prácticos no he matado a muchos de mis personajes, la verdad es que soy de gatillo fácil. De hecho, mis historias están llenas de gente muerta, así que supongo que la respuesta es un bien grande y rotundo.

Las muertes son de lo más variadas pero me acabo de dar cuenta de que tengo una insana fijación por asesinos y suicidas...

En fin, nada que os sorprenda a estas alturas...

¿Quieres escribir una novela? Semana 3

¿Los conoces?

Después de una semana  sin clase, volvemos a la carga con la tercera entrega de ¿Quieres escribir una novela?

En esta semana nos vamos a dedicar por entero a la construcción de personajes. Personajes de los que te enamores, que te hagan querer seguir escribiendo más y más palabras, una página tras otra. El objetivo también es, por supuesto, enamorar a tus lectores, hacer que ellos también quieran seguir leyendo las aventuras de estas personitas tan especiales.

Como ya os he comentado muchas veces, en mi caso concreto la creación de los personajes es una de las cosas más importantes. Son precisamente ellos, esos personajes que aparecen casi de la nada, los que me empujan a escribir su historia. Es un proceso inverso al de muchos escritores, lo sé, pero bueno, cada uno es diferente y lo importante es que encuentres tu propia fórmula, tu propia manera de sentirte cómodo a la hora de escribir.

Antes de nada, vamos a empezar por generalizar un poco. Aunque hay excepciones (como en todo en esta vida), lo habitual es que tus personajes sean los que llevan el peso de la historia. Ya pueden ser personas o cosas, un sacerdote o una pastilla de jabón, pero por lo general, las historias que leemos en los libros le suceden a alguien o algo.

De esta manera, tus personajes son algo clave en tu novela. Que sí, que todos conocemos historias en las que el personaje es lo de menos y lo importante es la acción, y también al contrario, no os creáis. Pero, incluso en los casos en los que tus personajes sean sólo una figura a la que le ocurren cosas, los lectores deben sentir interés por tus personajes. De lo contrario, si no les importa lo más mínimo lo que les ocurra, es bastante probable que cierren el libro y se vayan a hacer otra cosa.

Yo me enamoro continuamente de los personajes (de los míos y de los de otros), pero no tenéis por qué llegar a mi extremo…

Tus personajes, como todos, quieren conseguir algo. No tiene por qué ser algo grandioso. No todos los personajes tienen que querer salvar a la humanidad o acabar con el villano.  La ambición de tu personaje puede ser darse una ducha de la manera más tranquila posible sin que su hijo aporree la puerta sin parar. O no llegar tarde a una reunión. O hacer macarrones sin que se le peguen a la sartén. O convencer a ese chico tan mono para que se case con ella y no con su prima que es más guapa y más rica.

Por lo general, la mayoría de personajes, quieren ser felices y vivir tranquilos. Ya depende de ti, como autor, lo que tu personaje considere ‘felicidad’. Ya sabes, una ducha, una boda, una taza de cola cao sin grumos…  Lo que a ti te parezca bien. Ya sabes, ellos no se van a quejar…

Lo normal es que tus personajes sufran (un poco, o mucho, o muchísimo…) para conseguir sus objetivos. Si no, no tendríamos historia. Si tu personaje se muere por una taza de té, y se levanta y se la hace… pues, bueno, ya está. Fin. No hay mucho más que contar…

Es diferente si tu personaje quiere una taza de té y resulta que no le queda ni una sola bolsita. Va a casa de su vecina para pedirle una, pero su vecina sólo toma café. De modo que va hasta el supermercado de la esquina a comprar una caja pero, oh sorpresa, resulta que se le ha olvidado la cartera en casa…

Si tu personaje es una persona más o menos real, lo normal es que reaccione de alguna manera ante los imprevistos. Tus personajes son (por lo general) humanos, y como tales tienen sentimientos. Se enfadan, se agobian, se ríen, lloran… Son sus reacciones las que nos van a ir mostrando de qué pasta está hecho tu personaje, y las que, a la vez, nos va a permitir que la historia vaya cobrando forma.

Por ejemplo, en el caso del personaje que quiere un té, no es lo mismo que sienta fastidio por tener que dejar su apartamento para comprar té a que exija a voces una bolsa de té a cada uno de sus vecinos. Son reacciones diferentes y, por lo tanto, caminos diferentes que tomará tu historia.

Lo ideal es que tu personaje sea lo más parecido posible a una persona real. Y las personas reales no son perfectas, de modo que ya podemos olvidarnos de esos personajes tipo Mary Poppins, es decir, prácticamente perfectos en todo. No siempre somos amables, no siempre estamos de buen humor o nos apetece trabajar.

Ojo, lo mismo digo para los personajes perfectos en su maldad. Ese villano que se divierte retorciendo cuellos de pollitos como entretenimiento en sus ratos libres, que odia absolutamente todo el mundo y cuya máxima aspiración es acabar los buenos de la historia sólo porque sí no resultan poco creíbles, es que además son aburridísimos.

La teoría está clara, creo. 

Todos queremos escribir personajes inolvidables, de esos a los que seguirías hasta el fin del mundo. Personajes que te roben el corazón o que odies con tanta fuerza que te lleven a seguir leyendo sólo para ver cómo reciben lo que se merecen. No es fácil, por supuesto, pero para eso estamos aquí.

Para mí, lo que más me ayuda es conocer mucho a mi personaje. Suelo saber muchas cosas de ellos, aunque luego ni siquiera las utilice de manera directa en la historia, pero me ayuda a situarlos, a imaginarlos, a saber cómo van a reaccionar, lo que hace el proceso de escritura mucho más rápido y placentero.

Muchas veces no es algo que haga de una manera consciente. Simplemente puedo imaginármelos de pie ante mí, con sus expresiones faciales, su ropa y muchas veces incluso su olor. En mi caso concreto, soy mucho mejor construyendo personajes que desarrollando una trama coherente para ellos. Es una maldición, lo sé.

Dependiendo de vuestra historia tendréis uno o varios protagonistas, uno o dos antagonistas y una cantidad variable de gente que simplemente pasaba por allí. Perfecto. Tú eres el director de tu obra, de modo que tú mandas. Lo normal es que tus protagonistas y antagonistas sean los que se llevan toda tu atención, pero no descuidéis a vuestros secundarios.

Yo soy muy de enamorarme de secundarios, sé de lo que hablo.

Por supuesto que no hace falta que sepáis toda la vida de esa señora que se cruza con vuestra protagonista una única vez en la parada del metro, pero intentad que vuestros secundarios tengan algo que los haga únicos, algo que los haga ser algo más que una silueta recortada contra la pared.

La mejor manera de conocer a vuestros personajes es, por supuesto, preguntándoles. En esta página podéis ver un ejemplo de cincuenta preguntas que os van a hacerconocer mucho mejor a vuestras criaturas. Os puede parecer un poco excesivo (a mí me lo parece), pero a la vez me muero de ganas de hacer la prueba con mis protagonistas para el NaNo de este año.

Si os parece DEMASIADO podéis hacer una versión más corta. Preguntad lo básico a vuestros personajes: nombre, fecha de nacimiento, trabajo actual, familia, etc… También os puede resultar muy útil hacer un pequeño resumen de un día cualquiera en su vida: a qué hora suele levantarse, qué desayuna, qué hace después… Podéis ser todo lo detallistas que queráis y, obviamente, cuantos más detalles añadáis, mejor conoceréis a vuestros amigos…

Una pregunta clave que no se os puede olvidar hacer es ¿Qué es lo quiere? Desde casarse con un millonario hasta encontrar a su perrito perdido, eso ya depende de vosotros, pero es de vital importancia que sepáis esto ya que será lo que os haga avanzar la trama. Y os lo digo yo, que soy un desastre para estas cosas, pero este año me estoy portando bien.

En cualquier caso, tratad de visualizar a vuestros personajes. Si os sirve de ayuda, podéis incluso ayudaros con fotos de personas reales, actores famosos, tu prima, tu vecino del quinto… Si consigues verlo, sentirlo, probablemente tu escritura será más fluida, y tus personajes cobrarán vida ante tus lectores.

Cobrarán tanta vida, que muchas veces comenzarán a hacer cosas por su cuenta de una manera que ni os podéis imaginar…

Los deberes para la próxima semana creo que son bastante obvios. Deberéis empezar a intimar con vuestros personajes, comenzar a conoceros bien. Vas a pasar mucho tiempo con ellos, de modo que más te vale hacerlo ahora… Por supuesto, podéis hacerlo todo lo detallado que queráis, pero intentad, como mínimo, recopilar datos básicos:

-              -  Nombre
-              -   Edad
-              - Tres características físicas
-              - Tres características mentales

Y, sobre todo

-             - ¿Qué es lo quiere? ¿Cuál es su motivación?

Puede que conforme vayáis escribiendo vuestra historia tengáis que cambiar alguna o varias características, o incluso su motivación, pero recordad que todo este trabajo previo tiene como objetivo hacer la escritura de vuestra novela algo mucho más fácil de lo que pensabais en un principio.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 23

Sí, más o menos

23. ¿Cuanto tiempo sueles tardar en completar una historia?

Se ve que este Writing Meme tiene ganas de hacerme llorar... Si hablamos de novelas, la respuesta es simple: NO LO SÉ, NO PREGUNTÉIS MÁS, HOSTIAS. 

Ejem.

Aún no he terminado ninguna, y al paso que voy, probablemente tarde años, y no porque mi dedicación  sea plena precisamente...

En el caso de las historias cortas, que esas si están terminadas, lo normal es una o dos horas para una historia de unas dos mil o tres mil palabras. Soy malísima corrigiendo y editando, de modo que añadidle un par de horas más para ese proceso y listo calisto.

martes, 22 de octubre de 2013

Writing Meme: Días 15-22

Eso, eso

Como algunos ya sabéis, del 14 al 21 he estado en Graz (Austria) asistiendo a un curso sobre literatura y creatividad titulado Motivating Literacy. No voy a hablar del curso ahora, lo haré antes de morirme supongo dentro de poco, os lo digo para que sepáis la razón de mi tan añorada ausencia. Ahora me toca ponerme al día, pero tengo muchísimo trabajo atrasado, de modo que paciencia...

15. Un escritor que admires, sea o no profesional.

Supongo que cuando dicen uno en realidad es una manera de hablar, porque para mí sería imposible elegir. Voy a censurarme a mí misma y voy a ceñirme sólo a gente viva, para que veáis lo buena que soy. Así, de entrada, se me ocurren Kazuo Ishiguro, Julian Barnes, Neil Gaiman, Matías Candeira, Jesús Cañada o Juan Bárcena. tengo que hacer una mención especial a Adhara, a la que adoro y admiro con todas mis fuerzas, y a Fernando Alcalá, con los que empecé con esto del NaNo, y ahí seguimos...

16. ¿Escribes relaciones románticas? ¿Eres buena haciéndolo? ¿Escribes escenas de sexo?

Evidentemente, el que escribió este Writing Meme no me conocía de nada porque a nadie se le ocurriría hacerme una pregunta como esta. POR SUPUESTO que escribo relaciones amorosas, de hecho, para la vergüenza de mis antepasados e hijos que están por venir, muchas veces es lo único que escribo de una historia que podría dar bastante más de sí. Creo que soy buena. No, espera, sé que soy buena escribiendo este tipo de cosas. Igual debería presentarme para puesto de Escritora Jefe de la colección Jazmín...

En cuanto a la tercera pregunta... ¿qué creéis vosotros?

17. Protagonista favorito.

Saffron, sin ninguna duda. Por ser la primera en la que dediqué tanto tiempo y amor <3 <3 <3 Aunque todos tienen lo suyo, por supuesto. Ya os he dicho montones de veces que estoy muy enamorada de todos mis personajes.

A veces estoy muy enamorada de personajes que ni siquiera son míos, así que ya os dais cuenta del alcance de mi tragedia...

18. Antagonista favorito. 

Emm, umm, joder, esta es difícil... Supongo que Argo Penjar entraría dentro de esta categoría, así que venga, vale, why not?

19. Secundario favorito que decide tener más protagonismo.

Yo soy mucho de hacer hablar a gente que sólo pasaba por allí, y también al contrario, un personaje que iba a tener más protagonismo al final aparece así como de casualidad. En este caso, imaginaros si es secundario que ni siquiera lo escrito, pero he visto claro que Tres Tierras Tristes necesita un Capitán de la Guardia molón y aguerrido. No me presionéis, por dios, que estamos a la puerta del NaNo y bastante tengo ya..

20. ¿Cual es tu interacción entre personajes favorita? 

Creía que iba a tardar más en contestar a esta, pero entonces me he acordado de lo facilísimo que me resulto escribir las escenas con Aliaga y Amalia. Prácticamente se escribían solas, así que supongo que algo bueno debía ver ahí...

21. ¿Tus personajes tienen hijos?

Pues no, por ahora no. Igual en el futuro les da por ahí. A mí no me miréis, que estos acaban haciendo lo que les da la gana...

22. Una escena entre tus personajes que nunca hayas escrito.

Jej, esta está chupada, porque, de hecho, ninguna de mis historias está terminada (y ya veremos si alguna vez las termino,que al paso que va la burra...), de modo que tengo MONTONES de escenas no escritas aún.

Ejemplos variados:

- Aliaga se reencuentra con su familia y su padre está a punto de pegarle porque, en fin, cree que se ha cargado a su marido y ha huido.
- Quincey llama a Rain, después de un año sin saber nada de ello, y, lo que es más importante, justo después de que un meteorito casi arrase la Tierra.
- Batallas varias entre brujas.
- Suicidios varios.
- y puede que incluso un hijo ilegítimo, aún no lo tengo decidido...

Writing Meme: Día 14

NOTA: Programé esta entrada para el lunes 14, pero se ve que Blogger se lo ha pasado por el forro del chandal, de modo que, bueno, eso, aquí está. 


14. ¿Colocas en un mapa tus localizaciones?


Bah, venga, en realidad si miro algún mapa que otro, pero no de manera enfermiza, ya me entendéis. Mis personajes van de un punto a otro de la ciudad sin que me haya estudiado el callejero, vaya. Utilizo lo básico para no cometer errores , pero no es una parte primordial de mi proceso de escritura. 

Y ahora, amiguitos míos, me largo a Austria ;) 


domingo, 13 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 13

HAHAHAHATRUE -_- 

13. ¿Cual es tu cultura favorita para escribir, sea o no de ficción?

Lo cierto es que nunca había pensado en ello, pero lo bueno de este writing meme es precisamente eso, hacerte pensar sobre tus procesos de escritura, tus personajes, tus historias y demás pajas mentales. Para que veais de lo que hablo, iba a contestar que yo no tengo de eso, que no soy de ese tipo de gente, pero luego me he dado cuenta de que, lo quiera o no, haya escrito realmente de ello, o sea algún plot que espera pacientemente su turno, tengo predilección por situar mis historias en el Reino Unido.

Vaya novedad. Otra más para la lista, pensaréis.

Y tenéis razón, vaya. No es nada original. Es bastante aburrido, de hecho, pero qué queréis, yo soy así. Supongo que en realidad la culpa la tienen esos actores tan guapos que suelen robarme el corazón y que suelen ser ingleses todos ellos, porque molan y porque, en fin, es mejor echarle la culpa a otros. 

Dentro de que ocurran en Reino Unido son bastante diferentes, todo lo diferentes que pueden ser distintas ciudades y distintas épocas, pero básicamente, sí, eso, me declaro culpable. Ojo, escribir en un mundo de fantasía e irrealidad como COM! y Tres tierras tristes también mola, no os digo yo que no, pero los hechos hablan por si solos...

sábado, 12 de octubre de 2013

Writing Meme: Días 10, 11 y 12

Justo lo que yo he estado haciendo estos días...

Sí, lo sé, tres días sin escribir, TRES DÍAS. Pero tengo una buena excusa, claro. El día 10 terminé de trabajar justo a tiempo para ir a una recepción en la casa del embajador español en Bulgaria, el día 11 me estuve recuperando de la recepción en la casa del embajador español en Bulgaria (ejem, sí, bueno...) y hoy día 12 ya estoy aquí escribiendo, así que nada, al lío, que esto promete ser muy divertido...

10. Cual es la situación más extraña en la que se han visto envueltos tus personajes.

Pues, hombre, teniendo en cuenta que suelo escribir cosas muy raras, no sé muy bien qué contestar. En Tres tierras tristes hay brujas que tienen que cortarse a sí mismas para ver el futuro, hay gente que se comunica con los animales y hay dragones muertos. Tengo historias en las que niños ahogados visitan a sus amigos, ya crecidos; tengo una ciudad asediada por algo que nadie sabe muy bien qué es y tengo ángeles nocturnos traicionados por su propia familia.

Y no sé, de verdad, porque todo suele ser tan extraño, en general, que me cuesta elegir una...

11. Tu personaje favorito, y el personaje que menos te gusta.

Como ya os he dicho, suelo enamorarme muy mucho de mis personajes, y esta pregunta es cómo preguntar a quién quieres más, a mamá o a papá. Ya os lo he dicho, pero siempre querré mucho, mucho, mucho, a Saffron, mi Mary Sue primigenia. No fue la primera, claro (para buscar la mi primera marysue deberíamos viajar en el tiempo hasta, no sé, mis tres o cuatro tiernos años), pero sí fue la primera en la que puse mucho empeño. Saffron es muy divertida de escribir, con muchos procesos mentales absurdos y muchos momentos de happy shiny people, pero por eso mismo me encanta escribir sobre ella. Lástima que no lleve a ningún sitio, igual debería plantearme reutilizarla en otra historia...

En el lado contrario, y por decir a alguien, tengo que confesar que me costó (y me cuesta aún) pillarle el punto a Argo Penjar, de Tres tierras tristes. Se supone que es encantador, maravilloso y guapísimo y todas esas cosas, y después también un poco (bastante) cabrón e intrigante, pero me cuesta, me cuesta...

12. En qué historia has creado tu mejor mundo.

Pues, teniendo en cuenta que COM! es un vulgar ff (y el mundo ya estaba hecho, y no por mí, precisamente) y Uncertain transcurría en su mayor parte en una sala de congresos en Oxford (de vez en cuando salían, sí, pero poco, no nos engañemos), pues la respuesta obvia es, una vez más Tres tierras tristes. Me está dando la impresión, así en general, que parece que TTT mola, y no. 

A ver si me explico.

No es que no mole. A mí me gusta, y mucho, pero llevo cien mil palabras y no he llegado ni a la mitad de la historia, y eso se está alargando, y qué queréis que os diga, no tengo ni idea de lo que va a pasar a continuación y me estoy empezando a agobiar, hostias.

En fin. Mañana más.

miércoles, 9 de octubre de 2013

¿Quieres escribir una novela? Semana 2.

O no...

Después de la Semana 1, vamos de cabeza a por la Semana 2.

Si habéis trabajado durante esta semana pasada ya debéis tener una idea sobre qué vais a escribir vuestra novela.  Habéis pensado sobre lo que os gusta y lo que os disgusta, sobre lo que os apetece leer y lo que de verdad tenéis ganas de empezar a escribir.

¡Perfecto!

A no ser que seáis unos genios y entonces no sé que estáis haciendo aquí, lo normal es que ahora mismo sólo tengáis una ligera idea sobre lo que queréis escribir. Es decir, algo parecido a  Quiero escribir la historia de una mujer joven que se reencuentra con un compañero del colegio a quién le hizo mucho daño y se propone pedir perdón a todos con los que se portó mal.

Quiero escribir la historia de un pirata que toma como esclavo a un naturalista y desde ese momento su vida cambia y sólo quiere buscar animales.

Ese tipo de cosas. Está bien, es normal.

Tenéis grandes ideas, o ideas pequeñas, muy originales o no muy original pero te mueres de ganas de escribir sobre eso. Pero, por lo general, en este estadio de preparación de la novela todo lo que tenemos es eso, una idea general, vaga e imprecisa, que no nos cuenta mucho más de cómo va a desarrollarse nuestra historia.

Llega la hora, entonces,  de preparar propiamente dicho nuestra novela. Aquí nos encontramos con varias opciones posibles, porque como todo en esta vida hay gustos para todos…

Plotter VS Pantser

De esta manera, la mayoría de escritores se dividen en dos bandos bien diferenciados, y casi contrarios. Me refiero a los Planificadores (Plotter)*  contra los Improvisadores (Pantser).  Unos no conciben la manera de trabajar de los otros, y los otros se llevan las manos a la cabeza pensando cómo es posible que alguien pueda trabajar de esa manera, pero ya se sabe que cada persona es diferente…

Plotter (Planificadores) son aquellos que planifican todos los detalles de la novela que piensan escribir. Capítulos, números de palabras, acontecimientos importantes, trama principal y tramas secundarias… todo lo que os podáis imaginar ellos ya lo han pensado y apuntado.

Por el contrario, los Pantser (improvisadores) son aquellos que se sientan a escribir una novela como si fuera una aventura. Por lo general sólo conocen lo básico, y a partir de ahí se sientan cada día y comienzan una nueva aventura.

Los plotters afirman que si no conocen qué es lo que va a suceder en su historia serían incapaces de escribir nada; los pantser afirman que si supieran lo que va a ocurrir con su historia todo el misterio se habría evaporado y por lo tanto, serían incapaces de escribir nada.

¿Cuál es la postura correcta? Pues ninguna de las dos, o ambas. Pero, sobre todo, es una decisión muy personal y, como todo, depende mucho del carácter del autor.

En mi caso, adopto una postura intermedia. Me gusta planificar algo, un poco, lo suficiente para saber más o menos qué es lo que va a ocurrir, pero cuando más ideas tengo es cuando estoy realmente escribiendo.  Es en esos momentos, cuando estás en medio de la historia cuando los propios personajes te van pidiendo que escribas eso o aquello. Y todos sabemos que tú, como autor, eres un simple esclavo de tus personajes…

Tengo que decir, en mi experiencia personal, y con el marco de NaNo en mente, las veces que mejor me ha ido han sido las veces que he planificado algo, aunque sea un poco. Nunca he llegado a planificar todo todo todo, de modo que no sé si me serviría de mucho o todo lo contrario, pero alguna vez tendré que probar, digo yo…

Cuando hablamos de Plotter o Pantser no significa que los Plotter lo tengan todo planificado al milímetro y se nieguen a incluir ningún cambio. Al contrario, esas ideas que surgen de la nada mientras escriben se incorporan con mayor facilidad al tener ya un lugar concreto donde encuadrarlo.

Para mí, por ejemplo, me es de muchísima utilidad hablar sobre mi trama con algunos amigos. Hay autores que se niegan a hablar nada de lo que están escribiendo porque dice que entonces pierden el interés. Para mí es todo lo contrario. Hablar con mis amigos (especialmente con aquellos que también escriben) sobre lo que tengo planeado escribir no sólo me hace emocionarme aún más con mi trama, también, en muchas ocasiones, me da ideas que después serán de mucha utilidad.

En este caso, como puede que para muchos de vosotros sea la primera vez que os atrevéis a escribir una novela, creo que es mejor que trabajemos algunos conceptos básicos. Si sois Pantser a muerte pues bueno, tampoco os va a hacer daño…

Creo que es básico que antes de comenzar a escribir tu novela tengas claro algunos puntos obvios:

1. De qué va la historia (trama). Está bien que quieras ser el primer sorprendido en ver cómo evoluciona tu novela, no debes descartar el elemento sorpresa, pero creo que en esta ocasión sería bueno que prepararas un timeline, aunque sea corto, con los puntos más importantes de tu historia. Luego volveremos sobre esto, no os preocupéis.

2. Quién está en tu historia (protagonistas). Igual más adelante descubres que te hace falta con urgencia un personaje más en ese punto concreto de la historia o, que, sinceramente, la madre del vecino de tu protagonista no es especialmente importante, pero creo que para comenzar debes saber al menos lo básico sobre tus protagonistas. No vamos a hablar sobre los personajes ahora, el próximo día le dedicaremos toda la sesión.

3. Dónde transcurre tu historia (World Building). No es lo mismo construir una historia alrededor de una estudiante de piano en la Bulgaria contemporánea que hacerlo sobre un esclavo romano días antes de la muerte de César. Esto cobra mayor importancia si vas a escribir tu novela situándola en un universo alternativo, para la ficción histórica y para los mundos de fantasía. Si tu historia va a situarse en  un entorno especial (espacio, mundo fantástico) o incluso en una ciudad que no conoces, deberías marcar unas pautas para que todo concuerde de la mejor manera posible.


Construyendo un mapa de tu historia

Si quieres escribir a tiro hecho, sentarte cada mañana con algo en mente sobre lo que escribir en vez de andar estrujándote el cerebro para ver si te sale algo pseudodecente, creo que sería buena idea tener un mapa para no perderte.

Este mapa puede ser todo lo detallado que quieras, pero en el caso más básico, os aconsejo que apuntéis, como mínimo, tres momentos claves: el comienzo, el medio, y el final.

Lo del final os lo digo en serio, porque yo nunca (o sea, NUNCA) sé cómo van a terminar mis historias y ahí están, inacabadas y esperando que tenga piedad de ellas. De modo que nos lo vamos a tomar en serio (yo también), y vamos a trabajar en esto. 

Aunque cuando escribas vayas añadiendo o quitando cosas, hacer un outline te ayuda a ver dónde necesitas más atención con la trama, donde la acción va demasiado lenta o donde tienes que incorporar más información sobre tus personajes.

Este mapa mental puede ser tan largo y detallado o tan corto como queráis. Podéis escribir, uno por uno, los capítulos de vuestra novela, con todo lujo de detalles (puntos de vista, acciones más importantes, diálogos, etc.); o podéis apuntar una simple frase que te recuerde mentalmente qué es lo que tienes que tratar en ese capítulo. Esto último es lo que yo suelo hacer, pero como siempre, depende de la persona.

Vuelvo a repetiros que crear este mapa mental no significa que debáis ceñiros a él si os surge una nueva idea, o un nuevo personaje. Al contrario, siempre podréis incluirlo y ver por donde os lleva. Pero os asegura que tener este mapa resulta de muchísima ayuda cuando tienes que escribir cierta cantidad de palabras al día, como ocurre con el nano, y estáis sentados delante de vuestro ordenador sin que se os ocurra nada.

En ese momento vais a dar las gracias por haber apuntado aunque sea una frase del tipo La chica se enfada con el protagonista porque ha mirado a otra en la discoteca.

Estructura Narrativa

De nuevo, aunque seáis Pantsers puros de corazón, os aconsejo que en el momento de comenzar vuestra novela tengáis más o menos claro algo de la estructura narrativa que va a seguir vuestra historia.
Hay muchos tipos de novelas, muy diferentes unas de otras, y la estructura no siempre es la misma. Esto va a depender mucho de vuestra manera de escribir y de vuestra personalidad y voz como autor, pero, por lo general, todas las historias tienen unos puntos clave que es precisamente lo que hace que la historia avance. 

El modelo clásico, ese que aprendemos incluso en el colegio, es ese que no habla de una historia en tres actos: Inicio, nudo y desenlace.

Inicio: Conocemos a nuestros protagonistas, nos situamos en su mundo, y conocemos el primer punto de inflexión, que es cuando nuestros personajes comienzan a tener problemas (de cualquier tipo, ojo), y es cuando la acción comienza. No debería suponer más de un 25% del total de la historia, pero hay excepciones, por supuesto.

Nudo: Aquí ya estamos en el meollo de la cuestión. Este tramo debería ocuparnos un 50% de la historia, aproximadamente. El punto de inflexión que vimos en el inicio no hace si no complicarse cada vez más, de modo que nuestro protagonista tiene que superando diferente dificultades, hasta llegar al problema final, que vemos en el

Desenlace: Nuestro protagonista debe enfrentarse al mayor problema de todos (desde conseguir dinero para comprarse ese helado que tanto desea hasta acabar con su mayor enemigo en una batalla épica), todo se soluciona (para bien o para mal), y terminamos nuestra historia. Aquí dedicaremos el último 25% de la historia. 

Estos puntos de inflexión, estos problemas,  marcan los hitos más importantes en nuestra novela y es lo que nos da la base para empezar a trabajar. Por ejemplo, un punto de inflexión sería que nuestra protagonista se queda sin trabajo y tiene que volver a vivir en casa de sus padres. Su vida ha cambiado con respecto al comienzo de la novela,  pero con los siguientes puntos de inflexión la cosa se va a ir complicando hasta llegar al final, para bien o para mal. 

Fácil, ¿no?

Pues no, al menos para mí, de modo que yo también tengo que ponerme las pilas con esto.

Como deberes para la próxima sesión, os propongo que intentéis hacer un mapa de vuestra historia. Si sois Pantsers a muerte, intentad por lo menos imaginad los principales punto de inflexión de vuestra historia. Si os ayuda a visualizarlos, podéis pensar en puntos de inflexión de series/libros/películas.

En Frankenstein, por ejemplo, hay un punto de inflexión muy claro cuando el doctor abandona a su creación.

En Jane Eyre, la vida de Jane cambia cuando su tía la envía al orfanato, y luego vuelve a cambiar cuando comienza a trabajar para Mr. Rochester.

¿Ha quedado claro? Pues ya sabéis lo que tenéis que hacer ahora…


* Doy desde aquí las gracias a Adhara que fue la que me sugirió la traducción de Planificadores e Improvisadores para Plotter & Pantser. ¡Gracias galletita! 

Writing Meme: Día 9

Ese momento en el que te vengas de la gente en tus personajes...

Hoy toca una pregunta peligrosa, pero yo soy muy valiente...

9. ¿De dónde sacas las ideas para tus personajes? Describe el proceso de creación.

Contestar a esta pregunta podría llevarnos años, pero voy a intentar ser lo más breve posible. Dentro de lo que para mí significa ser breve, claro...

Creo que os lo he dicho alguna vez, pero para mí todo el proceso de escritura (al menos para las novelas y las historias largas, no tanto para los relatos cortos) comienza enamorándome de un personaje. A veces, de manera literal (Sandor Clegane, Tig Trager, y demás ejemplos chungos los tenéis a patadas...), otras veces sólo sintiendo una sana curiosidad por ellos. Con esto quiero deciros que mientras que hay gente que primero piensa la historia y luego piensa en los personajes que encajan, para mí es justo al contrario, así que esta pregunta es complicada.

Suelo pillar ideas de todas partes, y cuando digo todas es partes es así, literalmente. Gente que conozco, personajes de libros/series/películas, gente que me he cruzado por la calle durante tres segundos... No es coña. Laia me dijo una vez, mientras me contaba otra historia completamente diferente, algo así como y el portero del edificio era muy mono...

Vale. Ok. Paren las rotativas, que mi imaginación ya está funcionando.

No siempre sale algo aprovechable, claro, pero ese es más o menos mi proceso. Es decir, no-proceso-en-absoluto. Flechazos, amor, drama y cantidades ingentes de histerismo, as always. Porque yo soy así, ya sabéis, de modo que podéis esperar cualquier cosa, en cualquier momento. En otras ocasiones, las menos, necesito un personaje muy concreto (una putilla barata, una jefa cabrona, un ex novio algo sobón...) de modo que, o bien tiro de archivo personal, para ver si tengo algo que coincida, o simplemente, lo imagino desde cero, poniendo una capa sobre otra, una característica tras otra, y a veces (sólo a veces) da algo parecido a lo que estaba buscando...

Para lo que sí soy un puro desastre es para los nombres. Pero eso ya lo sabíais... 

martes, 8 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 8



¿Y este qué es lo que escribe?

8. ¿Cual es tu género favorito a la hora de escribir? ¿Y de leer?

Creo que es más fácil si empiezo comentando qué me gusta leer, y la respuesta es todo. Todo, pero con matices. No me importa el género, siempre que esté bien escrito, aunque, como muchos ya sabéis, siento predilección por los clásicos victorianos y por la ciencia ficción clásica, tipo Ray Bradbury o Philip K. Dick. 

Sin embargo, a la hora de escribir, mi experiencia se centra, sobre todo, en un montón de relatos que beben directamente de lo que yo suelo llamar malrrollismo, y es una mezcla extraña entre ciencia ficción, terror y relaciones raras entre mis personajes. Para las novelas, sin embargo, Uncertain podría considerarse ciencia ficción (por eso de que hay un meteorito que va a acabar con toda la humanidad, y tal); y Tres tierras tristes sería algo así como fantasía, pero en ambos casos el género se ha convertido en una mera excusa para que mi parejita ande jugando al gato y al ratón con sus, ay, complicados sentimientos...

Este año para el NaNo voy a intentar una historia a medias entre el costumbrismo y la comedia, con parejita con complicados sentimientos de por medio, porque si no no sería yo, de modo que ya os contaré cómo se me da... 

lunes, 7 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 7

Ay amigo, cuanta razón llevas...

Y por fin, una pregunta que puedo contestar sin enrollarme kilómetros y kilómetros...

7. ¿Escuchas música mientras escribes? ¿De qué tipo?

No.*

* No me molesta si hay música alrededor por la simple razón de que no la escucho. Si estoy escribiendo, ya sea para el blog o algo más creativo me concentro en lo que estoy haciendo y poco más. Por lo general no relaciono mucho la música con lo que escribo, a lo más que llego es a sentirme vagamente inspirada cuando la canción es muy triste, porque ya sabéis que tengo tendencia al drama... 

domingo, 6 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 6

Y por eso es mejor escribir en el ordenador...

Sí, lo sé, sólo estamos a día 6 de Octubre y ya estáis hasta el ombligo de esto del writing meme, pero no ha hecho más que empezar...

6. ¿Dónde te sientes más cómoda escribiendo?*

Sinceramente, puedo escribir en casi cualquier sitio, con música de fondo o no, con compañeros de piso hablando o haciendo la cena a mi alrededor. No me importa, suelo poder concentrarme bastante bien a la hora de evitar los estímulos externos. Lo malo son los estímulos internos, esos que me hacen querer parar cada diez segundos para ver fotos de mi último crush, pero no es de eso de lo que estamos hablando.

Puedo escribir de cualquier manera y en cualquier sitio con dos excepciones gordas y brillantes. Una, no me gusta que la gente se asome a ver qué estoy escribiendo. No. Un no rotundo. Mi padre solía hacerlo y me ponía de los nervios. Tan de los nervios que acababa por cerrarlo todo y ponerme a hacer otra cosa totalmente diferente, y aprovechaba para escribir los ratos que estaba sola en casa o por las noches. Lo bueno es que, cuando estoy en casa, Fausto pasa mucho tiempo fuera (trabaja mucho la criaturita), e incluso cuando está en casa no mira por encima de mi hombro y me deja hacer (saber que soy peligrosa en esos casos), así que no tengo queja. Incluso ahora que comparto piso con otros tres voluntarios no tengo problema porque cada uno va bastante a su bola en tema de trabajo, y nos buscamos nuestros rinconcitos propios, de modo que sí, puedo seguir escribiendo smut lo que quiera sin temor a fisgones...

La segunda excepción es que escribo mejor en el pc/tablet. Soy una nulidad escribiendo a mano, lo reconozco. Ni yo misma entiendo mi letra y las ideas se me embarullan y acabo perdiéndome en un mar de palabras absurdas que no llevan al lector a ninguna parte y a mí me deja tirada en medio de una carretera secundaria, haciéndose de noche y con coyotes aullando por los alrededores. Así que me veo esclava de las nuevas tecnologías, pero es que las veces que he intentado escribir algo a mano (algo más que apuntar alguna idea molona en mi chachilibreta, se entiende) he fracasado de la manera más miserable, de modo que ya me ha quedado claro que si quiero ser productiva tengo que andar tecleando.

En cuanto a comodidad, pues la verdad, supongo que pido (más o menos) lo que todo el mundo: buena iluminación, que no me duela el culo, fresco en verano y calentito en invierno; y té, mucho té. Litros y litros de té.

Dadme té y conquistaré el mundo. O, por lo menos, una nueva página de Word

* La pregunta también incluye un epígrafe que dice tal que así Use the 5 W's. Pero cómo no sé lo que es, me lo salto. Si alguien tiene la bondad de explicármelo, igual lo incluyo. O igual no, no lo sé... 


sábado, 5 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 5

Quien dice FB, dice buscando fotos de mi último crush...

5. Por edad, ¿cual es tu personaje más joven/viejo?

Me estoy dando cuenta de que tengo un problema con este meme. Y es que, si nos ceñimos únicamente a lo que he escrito durante toda mi vida, pues hombre, hay poco que rascar. Muchos relatos cortos, pero novelas como tal (espera que me parto de risa), pues sólo dos, y ni siquiera están terminadas... Pero claro, si cuento también todo lo que tengo por ahí anotado para escribir algún día, pues sucede todo lo contrario, que no acabaríamos nunca...

De modo que vamos a ser realistas y nos vamos a ceñir a lo ya escrito. Si es así, tengo que remontarme a mis relatos, que tengo varios protagonizados por niños, aunque no suelen tener nombres, porque yo soy así de molona. En mis novelas no han aparecido niños, al menos por ahora, pero si finalmente escribo la segunda opción que os propuse, voy a tener que dedicarle tiempo a una tierna criaturita de ocho o nueve años ;)

Me acabo de dar cuenta de que sólo tengo hasta el lunes para decidir qué voy a hacer con mi vida escribir este NaNo, pero sigamos a lo nuestro... 

Si nos vamos al extremo contrario, creo que mi personaje más viejo es la Reina Madre de Tres tierras tristes. La Reina de Hielo es vieja, muy vieja, y aunque todavía no he terminado esa historia, creo que no hay nadie más anciano que ella. O puede que sí, pero eso ya podría ser spoiler, hasta para mí misma.... 

Y poco más, la verdad. Mis personajes suelen moverse en un rango de entre veinte y cincuenta años, aproximadamente, así que poco tengo que añadir, bizcochitos míos.

viernes, 4 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 4

A algunos nos gusta el peligro...
Ok. Me acabo de acordar hace como diez minutos que tenía que escribir esto. Estaba yo tan feliz, leyendo fanfic, hablando con otros voluntarios (tengo la casa llena de portugueses ahora mismo, pero también hay por aquí una belleza lituana). De hecho, ahora mismo los escucho reírse en el salón y yo estoy aquí, escribiendo en la cocina, por vosotros, así que espero que sepáis apreciarlo.

Lo que hago por amor...

4. Tus primeras historias y personajes.

Bien, voy a tratar que esto no se alargue demasiado, porque con el tipo de pregunta y mi tendencia a alargarme estoy podría convertirse en una saga... El caso es que yo invento personajes e historias desde que puedo recordar. Siempre he leído mucho (o sea, mucho), nivel niña repipi repelente (ese nivel), pero la cosa no se quedaba ahí.

Qué va, ojalá.

Había veces que terminaba de leer, cerraba el libro y cogía otro y a seguir. Pero otras veces... ay amigos, otras veces me inventaba historias paralelas, aventuras extravagantes, personajes nuevos que salían de la nada porque yo tenía demasiada imaginación y demasiado tiempo libre, tampoco lo vamos a negar... 

Eso tiene un nombre, algo que descubrí mucho más tarde: Fan Fiction.

Pero no nos adelantemos, entonces yo me divertía en contarle a mis amigos mis historias, aunque ya apuntaba maneras, pocas veces las ponía por escrito, porque, bueno, siempre he sido muy perezosa, y porque (esto me sigue pasando, ojo) cuando lo escribía no sonaba ni la mitad de bien de lo que parecía en mi mente. 

De modo, que si tengo que deciros cuales fueron mis primeras historias y personajes, lo más probable es que fueran un aborto primigenio y a medio digerir de personajes de otras novelas. Aunque no me limitaba al fanfic, no os creáis. También inventaba mis propias historias, y muchas veces seguía un método bastante poco ortodoxo para mis, ejem, creaciones: al final de los libros venían los otros títulos que componían la colección (tipo El barco de vapor, para que os hagáis una idea), de modo que yo miraba esos títulos y me iba inventando las historias.

Ahí, con todo el morro. 

Como mi memoria es una mierda no es perfecta, apenas recuerdo mis historias. Recuerdo, vagamente, una cueva donde mis personajes entraban y viajaban en el tiempo (ehh... sí), un medallón encantado que dejaba escapar una musiquilla cuando mis protagonistas estaban en peligro (y mis protagonistas tenían una irritante tendencia a estar en peligro), y una trama de suspense que duraba, toda ella, tres páginas manuscritas, porque cuando tienes ocho años no le ves mucho sentido a alargar la trama, sí, al fin y al cabo, resulta clarísimo que el asesino es el mayordomo.

Sí, en serio.

Cuando me fui haciendo mayor, empecé a querer escribir en serio, con ese complejo de niña repipi (ahora adolescente raruna) que me ha acompañado toda la vida, pero ahora con una vergüenza mortal que, curiosamente, era inversamente proporcional a lo allegadas que fueran las personas que lo leían. Así, mis padres y familia tenían el acceso totalmente prohibido, peeeero mis profesores o compañeras de clase que me caían mal podían leerlo. Tiene mucho sentido, sep. 

El pico en mi popularidad llegó cuando gané un concurso de relatos. Quedé la tercera, no os vayáis a creer pero gané ¡10000 pesetas! Yo tenía diecisiete años y fue el primer dinero que gané escribiendo (el único hasta la fecha, no os engañéis), y me dio tantas falsas esperanzas que todavía las arrastro.

Pero no os preocupéis, porque apenas un año más tarde me pusieron conexión a Internet en casa, y descubrí un sitio en el que la gente publicaba, sin ningún tipo de verguenza, historias sobre Mulder y Scully, y el profundo amor que todos sabíamos que se tenían pero que los malvados guionistas de la serie no nos dejaban ver, y fue toda un revolución.

Y entonces me caí en ese pozo profundo que es el frikismo, y aún no he salido. Y hasta ahora. 

jueves, 3 de octubre de 2013

Writing Meme: Día 3

Mary Sue, my name is Mary Sue

Hoy más tarde de lo normal, pero a tiempo (todavía).

3. ¿Cómo eliges los nombres de tus personajes?

Venga, vale. Hemos tocado hueso, doctor. Si os digo la verdad, no lo sé. No, en serio, supongo que hay gente que elige los nombres de sus personajes atendiendo a significados cabalísticos, a la suma de las vocales menos la resta de las consonantes, y ese tipo de cosas.

Bien, yo no soy una de esas personas.

Soy tan poco de ese tipo de personas que en muchas ocasiones he llegado a escribir escenas y capítulos con el nombre genérico de Muchachita (no es coña) o MarySue, y luego (más tarde, en otra vida) lo cambio. En mis relatos cortos, los personajes no suelen tener nombres, pero claro, eso es complicado en una novela.

Si pienso en las historias que tengo escritas, y pienso en los nombres (Sevandor, James, Aliaga, Rain...) me asalta la duda tremenda de no tener ni idea de dónde han salido. Imagino que vienen de un lugar insondable y oscuro, en lo más profundo de mi cabecita loca. En el caso de El amor está de oferta (ejem, sí), el nombre surgió por una confusión con mi propio nombre (Susana, si os lo estáis preguntando) que en su momento no me hizo gracia y luego se quedó como una coña.

Lo bueno de escribir fanfic es que estos problemas no lo tienes. Bueno, sí, sólo tienes que pensar en el nombre de la MarySue, pero no es lo mismo elegir un nombre que cincuenta, eso es obvio... Lo cierto es que cuando me pongo a pensar un poco en cierta historia los nombres empiezan a salir solos, supongo que por sonoridad, pero de verdad que sigue siendo un misterio para mí.

Y eso con los nombres, que si hablamos de títulos ya nos podemos morir. Ahí sí que soy una nulidad total y absoluta. Menos mal que tengo a Henry, que suele echarme una mano con estas cosas...